La Plataforma en Defensa de la Libertad de Información (PDLI) celebra el archivo de la causa abierta contra los responsables de la revista satírica ‘El Jueves’, pero lamenta que no se haya evitado lo que en términos jurídicos se conoce como ‘efecto desaliento’ (chilling effect),  o efecto autocensura, al haberse admitido a trámite la denuncia e instruido la causa, manteniéndose la imputación durante dieciocho meses, a pesar de que la Fiscalía había pedido archivar el caso.

Guillermo Martínez-Vela y Joan Ferrús, director y subdirector de El Jueves, respectivamente fueron denunciados por organizaciones sindicales de la Policía Nacional en octubre de 2017 por un presunto delito de injurias por un chiste en el que se sugería que los antidisturbios desplazados a Catalunya por el referéndum consumieron cocaína “hasta acabar con las reservas”.

La PDLI manifestó entonces su rechazo ante esta denuncia y defendió que el chiste estaba amparado por la libertad de expresión, además de condenar “las denuncias que buscan amedrentar”.

A pesar de ello, la denuncia se admitió a trámite y, hace ahora un año, en mayo de 2018, la titular del juzgado de instrucción 20 de Barcelona, Maria Eva Molto, daba por cerrada la instrucción en la que veía indicios de delito, lo que trasladaba a la Fiscalía para que presentase escrito de acusación con el objetivo de abrir juicio oral a los acusados, según informó entonces eldiario.es

Los responsables de ‘El Jueves’ siempre han sostenido “que la noticia que elaboraron y publicaron era falsa y con intención satírica, al igual que todo el contenido de la revista, con lo que no consideraban que tuviera un carácter injurioso”.

Ahora, la Audiencia de Barcelona archiva la causa al entender que era una “caricatura” con la que la revista no buscaba denigrar ni incitar a la violencia.

Prevalece la libertad de expresión

En su decisión, las magistradas de la Audiencia de Barcelona, se han basado en la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) que requiere tener en cuenta el contexto en el que se producen las posibles injurias, y entienden que, en este caso, “al tratarse de una revista de denuncia, crítica social y política y manifestación de la creación artística”, debe prevalecer la libertad de expresión al hecho de que los policías “puedan sentirse molestos e insultados”.

Según las magitradas, “el artículo no deja de ser una caricatura que de la Policía Nacional hace la revista igual que hace de otras instituciones, políticos y personajes de la vida pública, no conteniendo mensaje de odio ni cargas de hostilidad que inciten a la violencia ni promoviendo el odio ni la intolerancia”.

Los límites de los delitos de odio

También descartan las magistradas que el chiste pueda considerarse delito de odio, como sostenían los policías que denunciaron a los humoristas.

Argumentan las magistradas que en ningún caso puede suponerlo porque, “por un lado, no contiene mensajes discriminatorios, y, por el otro, el motivo por el que fue escrito no es racista, antisemita o por la ideología, religión, etnia, raza, orientación sexual, enfermedad u origen nacional –circunstancias protegidas por los delitos de odio– sino simplemente se publicó por la actuación de los antidisturbios el 1-O”.

Más información:

La justicia ampara bajo la libertad de expresión el artículo de ‘El Jueves’ sobre cocaína y antidisturbios del 1-O | eldiario.es (27/05/2019 )

La Audiencia de Barcelona archiva la causa contra ‘El Jueves’ por el artículo que ironizaba con los antidisturbios y la cocaína | Público (27/05/2019)

[Imagen: Guillermo Martínez Vela, director de ‘El Jueves’ y dibujante. Fotografía: UND_R CONSTRUCTION (Álvaro Rincón Sanz) (CC-BY-SA)]