La Plataforma en Defensa de la Libertad de Información (PDLI) se ha sumado al manifiesto ‘La libertad de preguntar’ con el que más de un centenar de periodistas le piden al Gobierno transparencia y mayor equilibrio en la gestión de las preguntas de los medios en las ruedas de prensa telemáticas que están celebrando a diario desde que se decretó el estado de alarma.

La PDLI, que ya había criticado días atrás las filtraciones selectivas de normas en proyecto, recuerda al gobierno que “nunca es tan necesaria la transparencia y la rendición de cuentas como en un Estado en situación excepcional”.

En el manifiesto se reclama al Gobierno ruedas de prensa libres y sin control previo, sobre todo en un momento como el actual con la emergencia del coronavirus.

El documento ha sido suscrito por la mayoría de los comunicadores que cubren la información del Gobierno así como por muchos otros profesionales, entre otros, por la presidenta de la PDLI y directora de Público, Virginia Pérez Alonso.

Los firmantes critican el método que está empleando la Secretaría de Estado de Comunicación, con preguntas que se envían antes o durante las ruedas de prensa pero pasan el filtro del titular de ese departamento, Miguel Ángel Oliver, antes de ser formuladas.

Entre los profesionales que respaldan este escrito se encuentran: Bieito Rubido, Paula de las Heras, Juanma Romero, Nieves Goicoechea, Esther Palomera, Irene Castro, Eduardo Suárez, Karina Sainz-Borgo, Jesús Cacho, Vicente Olaya, José Antonio Zarzalejos, Ángel Expósito, Félix Madero, Pedro García Cuartango, Ana Isabel Sánchez, Rubén Arranz, Ana Pardo de Vera, Cruz Morcillo, Esther Esteban, Ana Rosa Quintana, Paloma Barrientos, Daniel Basteiro, Carlos E. Cué, Beatriz Cortázar, Chelo Montesinos, María Eizaguirre, Ana Terradillos o Ana Pastor, entre otros muchos.

Manifiesto

A continuación reproducimos el contenido íntegro del manifiesto:

#laLibertaddePreguntar

En una situación de crisis el derecho a la información es más importante que nunca. Con España en estado de alarma, el Gobierno disfruta de unos poderes muy superiores a los normales, por lo que es importante que la prensa realice su labor de control, más aún cuando el Parlamento ha limitado enormemente su actividad. La principal forma de ejercer esta función desde el periodismo es a través de las preguntas -y las repreguntas- a los miembros del Gobierno.

Sin embargo, la Secretaría de Estado de Comunicación ha organizado un sistema en el que todas las preguntas enviadas por los periodistas pasan necesariamente por el filtro del secretario de Estado, que es quien se está ocupando personalmente de formulárselas al presidente, a los ministros o a los técnicos. Es más, el propio secretario de Estado ha llegado a formular alguna pregunta al presidente del Gobierno, o incluso ha tratado de corregir públicamente a alguno de los técnicos.

Las dificultades técnicas no son más que excusas. Otros actores políticos, nacionales e internacionales, realizan ruedas de prensa telemáticas en las que los periodistas habituales formulan las preguntas directamente a través de videollamada. De esta manera, tienen la posibilidad de preguntar directamente, lo que les permite formular la cuestión después de haber escuchado la comparecencia. Del mismo modo, tienen la posibilidad de repreguntar. Es así, y sólo así, como las personas que dan la rueda de prensa no pueden responder con evasivas, tal y como ha sucedido reiteradamente en las ruedas de prensa organizadas en el Palacio de La Moncloa.

Estas líneas no tienen como objetivo defender ni condenar la gestión del Gobierno en la crisis del coronavirus, sino garantizar que los medios de comunicación puedan realizar su función sin mordazas y sin dificultades añadidas.

Estas líneas no tienen como objetivo defender ni condenar la gestión del Gobierno en la crisis del coronavirus, sino garantizar que los medios de comunicación puedan realizar su función sin mordazas y sin dificultades añadidas. Estas no son más que excusas para controlar a la prensa. Que las preguntas al Gobierno las formule un miembro del propio Gobierno revela falta de transparencia y un interés por controlar la información. Su consecuencia deriva en una nueva forma de censura a los medios y un desprecio intolerable a los mismos ciudadanos a los que se reclama enormes esfuerzos que mayoritariamente están cumpliendo a rajatabla.

En ningún caso la declaración del estado de alarma supone una merma en la aplicación del artículo 20 de la Constitución Española

En ningún caso la declaración del estado de alarma supone una merma en la aplicación del artículo 20 de la Constitución Española, que reconoce un derecho fundamental como es el derecho «a comunicar o recibir libremente información veraz» (20.1.d CE) y que el ejercicio del mismo «no puede restringirse mediante ningún tipo de censura previa» (20.2 CE).

Por todo ello, reclamamos el inmediato cambio del procedimiento para todas las ruedas de prensa y comparecencias de miembros del Gobierno y solicitamos el apoyo de los profesionales de la comunicación a una reivindicación no partidaria que mejorará la calidad democrática en España y el ejercicio de nuestros derechos civiles amparados en la constitución, máximo garante de nuestra convivencia, especialmente en situaciones excepcionales como la que vivimos.

Más información

Periodistas reclaman al Gobierno ruedas de prensa libres y sin control previo | Público, 31/03/2020

Información relacionada

Especial: emergencia Covid-19 y libertad de expresión e información (página en actualización permanente)

[Imagen: los ministros de Sanidad y de Interior durante la rueda de prensa telémática del lunes 30 de marzo en Moncloa. Fotografía: Pool de Moncloa/Borja Puig de la Bellacasa]