Las ruedas de prensa sin preguntas, en el punto de mira de la PDLI
La Ley de Transparencia, la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual y las ruedas de prensa sin preguntas fueron algunos de los asuntos que se abordaron en el encuentro que el pasado día 4 se celebró entre los integrantes de la delegación internacional de organizaciones defensoras de la libertad de información y la secretaria de Estado de Comunicación, Carmen Martínez Castro.
A dicho encuentro asistió también la presidenta de la recién constituida Plataforma en Defensa de la Libertad de Información (PDLI) y vicedirectora editorial del Grupo 20minutos, Virginia Pérez Alonso, quien presentó los objetivos de la Plataforma a la secretaria de Estado y le trasladó la preocupación de los integrantes de la PDLI por las amenazas contra la libertad de información en España, sustentadas en gran parte en reformas legales promovidas por el actual Gobierno.
Precisamente ayer se conoció una de las consecuencias de la aplicación de dichas reformas: el anuncio de Google de que retira de España su servicio Google News a raíz de la entrada en vigor el 1 de enero de la reforma de la Ley de Propiedad Intelectual (LPI).
Sobre las sensibilidades que recoge dicha Ley, la secretaria de Estado aseguró que el Gobierno ha recogido los puntos de vista no solo de la AEDE (Asociación de Editores de Diarios Españoles) sino de distintos periodistas que reivindican la propiedad individual (y no de los medios para los que trabajan) de los derechos de sus obras/artículos. Pero “no se puede gustar a todo el mundo”, concluyó, cuando la presidenta de la PDLI le planteó las críticas que desde otros ámbitos periodísticos, empresariales y jurídicos han surgido en torno a la irrenunciabilidad del llamado #CanonAede, una cuota que la nueva LPI establece de pago obligatorio para aquellos agregadores que recojan noticias de medios, y cuyo cobro es “irrenunciable”, aunque haya quienes no deseen cobrarla.
Según le trasladó Pérez Alonso a la secretaria de Estado, esta categoría de “irrenunciabilidad” equipara el derecho a la propiedad intelectual a los derechos fundamentales, algo que la PDLI considera desmesurado, máxime teniendo en cuenta que derechos como el de libre acceso de la ciudadanía a la información pública no son considerados fundamentales en España. Martínez de Castro matizó que la LPI “reconoce esa irrenunciabilidad, pero no la regula”, haciendo referencia al reglamento que desarrolla dicha ley y que todavía no ha sido elaborado.
Para la secretaria de Estado, dicha reforma “es un gran avance, que supera algunas de las deficiencias de aplicación en otros países y que aborda el dominio de grandes agregadores”.
La Ley de Transparencia
En la reunión, que contaba con representantes del International Press Institute, Access Info, la Federación Europea de Periodistas y el Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, también se abordaron cuestiones relativas a la Ley de Transparencia, que entró en vigor este 10 de diciembre, como su desacompasamiento respecto a los estándares internacionales de transparencia, la exclusión en el artículo 18 de la posibilidad de solicitar información como informes, notas internas o cualquier documentación pública que no conste de una definición jurídica y la preocupación por la limitación que supone reconocer tan solo el acceso a información administrativa.
Martínez de Castro aseguró que “se ha hecho un enorme esfuerzo por tener en cuenta opiniones distintas” y pidió “darle una oportunidad a la ley”. La presidenta de la PDLI manifestó su sorpresa por el hecho de que una Ley de Transparencia recién nacida no constituya siquiera un instrumento eficaz para publicar los gastos en viajes de los senadores –al hilo del caso Monago-, a lo que la secretaria de Estado respondió que las preguntas relativas a la transparencia del poder legislativo deben ser dirigidas a este.
“En España no hay ruedas de prensa sin preguntas”
En cuanto a las ruedas de prensa sin preguntas, la secretaria las calificó de “leyenda”, afirmó que “en España no hay ruedas de prensa sin preguntas” y diferenció las ruedas de prensa –“donde sí se permiten preguntas”, aclaró- de las declaraciones institucionales y comparecencias, en las que los periodistas solo reciben información.
También calificó de “anécdota” la famosa comparecencia de Rajoy a través de una pantalla de plasma, en febrero de 2013. Pérez Alonso comunicó a la secretaria de Estado que la PDLI monitoreará las ruedas de prensa, comparecencias y declaraciones institucionales para poder evaluar de manera objetiva el grado de respuesta del Gobierno a las preguntas que la ciudadanía les plantea a través de los periodistas.