La Plataforma en Defensa de la Libertad de Información (PDLI) se ha dirigido al embajador de Reino Unido en España, Simon Manley, para transmitirle su preocupación y rechazo por la decisión de su gobierno de aceptar la extradición de Julian Assange, editor de Wikileaks, a Estados Unidos donde se enfrentaría a peticiones penales muy severas por el hecho de haber puesto a disposición de la ciudadanía, en muchas ocasiones, a través de los principales medios europeos, y en colaboración con ellos, información relevante y de indudable interés público.

A juicio de la PDLI, la decisión de Reino Unido es una amenaza para el derecho a la información, la protección de los denunciantes y la seguridad de los periodistas y medios europeos.

La Plataforma recuerda al embajador que “ el Parlamento Europeo en una reciente propuesta de Directiva, reconoce que los denunciantes ‘ayudan a prevenir daños y a detectar amenazas o perjuicios para el interés público que, de lo contrario, podrían permanecer ocultos’; y añade que, como fuente de información, son ‘esenciales para que el periodismo de investigación pueda cumplir su función de vigilancia’”

Además, la PDLI destaca en su escrito que “las principales historias periodísticas mundiales de los últimos años, objeto de los más prestigiosos reconocimientos de la profesión y del aplauso internacional, han tenido su origen en filtraciones, una herramienta irrenunciable para que irregularidades y abusos salgan a la luz, como reiteradamente enfatiza la mencionada propuesta del europarlamento aprobada la última legislatura”.

Sobre la figura personal de Julian Assange, la PDLI entiende que se tratan de consideraciones que “carecen de cualquier relevancia en la cuestión que nos ocupa: los cargos a los que se enfrenta no tienen otra causa que el hecho de haber puesto en conocimiento de los ciudadanos información relevante y de interés público que permanecía en secreto impidiendo que se conocieran irregularidades graves”.

Y concluyen que “la extradición del editor de Wikileaks es un hecho de una enorme gravedad y supone una amenaza a la libertad de información, al vulnerar los estándares internacionales sobre libertad de prensa y Derechos Humanos”.

Al conocerse la noticia, y a propósito del debate sobre si a Assange debe considerársele o no periodista, el director legal de la PDLI, Carlos Sánchez Almeida explica que la clave no es que lo sea, o no, sino que ha publicado información de interés público y advierte: “Si Julian Assange es extraditado por publicar información, ningún periodista está a salvo en Europa. Cuando vayan por vosotros, decidle a la policía que Julian Assange no era periodista, a ver si cuela”, en alusión al riesgo jurídico en el que se encuentran los medios y profesionales que publican filtraciones.

Documento

Carta de la presidenta de la PDLI, Virginia Pérez Alonso, al embajador británico en España