En el Congreso Mundial de Periodismo que se está celebrando en Doha, con la participación de la Plataforma en Defensa de la Libertad de Información (PDLI), se acaba de aprobar la Declaración Internacional sobre la Protección de los Periodistas.

Se trata de un texto que resume los principios internacionales relativos a la protección de los periodistas que operan en entornos peligrosos, haciendo hincapié en las responsabilidades de los Estados para garantizar su seguridad y combatir la impunidad. El documento recoge las medidas que medios y periodistas deberían adoptar para reducir los riesgos.

Un ataque a un periodista en cualquier lugar es un ataque contra el periodismo en todas partes. Por otro lado, un ataque a periodistas o al periodismo es un ataque contra el derecho del público a ser informado y a gobernarse democráticamente.

Antes de su aprobación en este Congreso Mundial, el documento fue analizado y discutido en dos mesas redondas de expertos: la primera, en Nairobi el 3 de septiembre de 2015 y la segunda en Londres el 14 de septiembre de 2015. Cada mesa reunió a más de 35 expertos en representación de las principales empresas de medios, medios de comunicación internacionales y pulse organizaciones de libertad de los medios de comunicación, asociaciones y organizaciones profesionales, expertos legales, académicos, abogados y defensores de la libertad de prensa y activistas.

La Declaración consta de dos partes: Una primera que resume los principios internacionales relativos a la protección de los periodistas que cubren eventos en entornos peligrosos y víctimas de violaciones de derechos humanos, centrada en las responsabilidades de los Estados y las instituciones que participan en este campo; y otra titulada “Buenas Prácticas de Medios”, con las directrices que medios de comunicación y periodistas deberían implementar con el fin de lograr una mayor seguridad.

Recomendaciones

Así, entre otras pautas, se recomienda:

  1. No escatimar esfuerzos, por parte de las empresas informativas, en la adopción de los mejores protocolos de seguridad para los periodistas, asignando una parte adecuada de su presupuesto a este fin.
  2. Proporcionar formación sobre seguridad en general para todos los periodistas, incluyendo elementos relacionados con la seguridad digital.
  3. Los medios deben desarrollar e implementar procedimientos y herramientas destinadas a garantizar la seguridad física y psicológica, así como la seguridad digital de sus periodistas.
  4. Los periodistas deben ser informados sobre sus derechos y obligaciones bajo las leyes internacionales, así como sobre las leyes nacionales de los países en los que operan.
  5. Además de los riesgos de seguridad que afectan a todos los periodistas, las periodistas se enfrentan a problemas de seguridad específicos de género, que requieren atención y medidas apropiadas.
  6. El apoyo público para el periodismo y los periodistas contribuye a la seguridad de este último. Por el contrario, la falta de este tipo de apoyo a menudo alimenta los ataques contra periodistas y reduce la presión sobre los gobiernos para poner fin a la impunidad de este tipo de ataques. En muchos casos, la falta de apoyo del público es una consecuencia de las tensiones políticas o de otro tipo y los ataques verbales en el discurso público. La credibilidad y la independencia de los medios de comunicación y la práctica de las normas éticas periodísticas contribuyen a atraer el apoyo público y deben ser valorados. Incumplimientos ocasionales en el comportamiento profesional de los periodistas nunca deben ser usados ​​para justificar los ataques.
  7. La solidaridad entre los periodistas es vital cuando los miembros de la profesión se enfrentan a amenazas y ataques. La cooperación entre las organizaciones de medios de comunicación en la denuncia de los crímenes contra periodistas y la creación de una campaña global contra los ataques a periodistas pueden ser herramientas eficaces. Un ataque a un periodista en cualquier lugar es un ataque contra el periodismo en todas partes. Por otro lado, un ataque a periodistas o al periodismo es un ataque contra el derecho del público a ser informado y a gobernarse democráticamente.

La Declaración concluye invitando a medios de todas las regiones del planeta a suscribir este documento y llevar a la práctica sus directrices.

La PDLI promoverá la firma de la Declaración

Sobre esto, la Plataforma en Defensa de la Libertad de Información (PDLI), asume el compromiso de promover esta Declaración entre medios e instituciones españoles, instándoles a adoptar las medidas que en la misma se proponen.

Precisamente, entre las actividades a desarrollar por la PDLI durante este año destacan los programas de formación dirigidos a periodistas, tanto los relativos a su seguridad jurídica, con cursos sobre la legislación en materia de libertad de información en España y la edición de un manual, como a su seguridad digital, con talleres dedicados a explicar los riesgos de los sistemas de comunicación convencionales y cómo sortearlos (principalmente, aunque no solo, con herramientas de cifrado).

El primero de estos talleres tendrá lugar el próximo 29 de marzo en Zaragoza, en colaboración con la Asociación de Periodistas de Aragón.

Más información:

Texto íntegro de la Declaración Internacional sobre la Protección de los Periodistas (inglés)

FOTOGRAFÍA: IPI